ALEJANDRO TUMANOFF CICLOTURISMO
6 de Abril de 2002 Para esta salida, que es una de las que mas me gusta, decidi por primera vez convocar a otros cicloturistas a traves de btt.com.ar, es asi que ademas de mi amigo Oscar y Roberto de la Boca, participaron Pablo que se estaba iniciando en el cicloturismo y Eduardo de Zarate. Llegamos a la estacion de Otamendi bajo un cielo amenazante y con altas probabilidades de lluvia, a pesar de esto igual inciamos la travesia sabiendo que si llegaba a llover se complicaria muchisimo ya que casi todo el camino es de tierra y no hay posibilidad de abandonarlo, una vez que se entra no hay marcha atras. Pasamos la tranquera de entrada a la reserva Otamendi junto a la estacion y tomamos el camino de ripio hasta la primer balsa que cruza el Parana de las Palmas, que por suerte salio enseguida.
En las fotos de arriba el grupo en el transbordador y al lado Roberto saliendo de la embarcacion. El camino que sigue hasta el canal Alem se puede leer en una travesia anterior que relate en la seccion Travesia al Corazon del Delta
En las fotos superiores a la izquierda cruzando en la balsa el Rio Carabelas Grande para almorzar en el camping al lado de la escuela 26, a la derecha esperando la misma balsa para seguir el camino hacia el Recreo Blondeau. Al llegar al Canal Alem encontramos un destacamento policial con un pequeno muelle y un par de casas, en la orilla de enfrente el Recreo. Un policia nos indica que para cruzar podemos utilizar un bote que esta amarrado al muelle. Ante el temor de que las bicis terminen en el fondo del canal busco en una de las casas a un muchacho para que nos haga de botero, es asi que en el primer viaje cruza haciendo equilibrio Pablo y las bicis, y en un segundo viaje el resto del grupo.
Del otro lado del canal se baja en el muelle del Recreo, seguimos por un camino al lado del rio, cruzamos un puente sobre un arroyo, un cartel mas adelante nos indica Propiedad Privada igual seguimos por el sendero, cruzamos cuatro o cinco casas y de nuevo estamos en camino. Durante algunos kilometros el camino se ve bastante abandonado hasta que llegamos a otro que se nota mas transitado, igual no cruzamos a nadie ni se ven mas casas. Mientras avanzamos el cielo sigue amenazante, fuertes truenos se escuchan a lo lejos. El camino principal nos sigue llevando, no hay ningun cartel indicador, solo tengo dudas en un cruce que por suerte tomamos la direccion correcta. Volvemos a hacer una parada para comer en el medio del camino, sacamos las ultimas barritas que nos quedan y Pablo nos convida con queso y fiambres que llevo. Continuando la pedaleada alcanzamos la ruta 12 aproximadamente en el kilometro 101 . Esta ruta a pesar de tener dos carriles de cada mano es bastante peligrosa por el gran porte de los camiones que por ella transitan, por suerte este sabado habia muy pocos vehiculos. Nos alineamos en fila india y a 32 km/h rumbeamos para el puente de Zarate.
Subimos el puente por el angosto pasillo entre el guardrail y la baranda, luego de la detencion de rigor para las fotos y apreciar el paisaje desde esa altura comenzamos el descenso, ingresamos en la zona urbana de Zarate, circulando por sus calles llegamos a la estacion en el preciso instante en que se largo una lluvia torrencial. Nos despedimos de Eduardo que se quedo en su casa de Zarate, el resto abordamos el tren de regreso a Capital.
Nosotros con las vueltas que dimos terminamos haciendo 79,34 Km. P.D. Ademas de comida y agua es fundamental no olvidarse el repelente. |